El departamento de Risaralda se encuentra realizando intervenciones en 140 predios ubicados en Áreas Estratégicas para la Conservación de Recurso Hídrico, las cuales en su gran mayoría hacen parte de las Áreas Protegidas del Departamento, espacios que buscan proteger los ecosistemas estratégicos, una mayor sostenibilidad ambiental y mejorar el hábitat de la diversidad de flora y fauna propias de este territorio. Este 3 de marzo, cuando se conmemora el Día Mundial de la Vida Silvestre, cobra vigencia esta labor de cuidado y recuperación en la que también participan activamente los ciudadanos.
“Cabe destacar el trabajo conjunto
que estamos haciendo en el marco del convenio suscrito entre la Gobernación de
Risaralda y el Comité de Cafeteros de Risaralda para atender estas zonas de
conservación, en las que adelantamos acciones que permiten incrementar
coberturas vegetales para mejorar las condiciones de la fauna silvestre y
aumentar la regulación de fuentes hídricas, así como minimizar los impactos
causados por la variabilidad climática”, explicó el secretario de Planeación y
Ambiente de Risaralda, Mauricio Alberto Vega López.
En el marco de este convenio se está
protegiendo la vegetación nativa como arbolocos, tachuelos, yarumos, laureles,
higuerones, cedros, siete cueros, robles, guamos, entre otras especies
vegetales que actúan como refugio y alimentación para especies animales propias
de la zona como tángaras, atrapamoscas, cucaracheros, loros, barranqueros,
tucanes, gavilanes, águilas, halcones, colibríes, pavas de monte, rastrojeros,
tigrillos, guaguas, guatines, osos perezosos y de manera particular, especies
de especial conservación como la danta de páramo y el oso de anteojos, que se
han avistado recientemente en predios de Santa Rosa de Cabal y La Celia, justo
en predios donde se adelantan labores propias de conservación y recuperación.
“Con estas acciones estamos
contrarrestando amenazas ambientales que tenemos en Risaralda; los animales
salvajes y las plantas silvestres, además de su valor intrínseco, contribuyen a
los aspectos ecológicos, genéticos, sociales, económicos, científicos,
educativos, culturales, recreativos y estéticos del bienestar humano y el
desarrollo sostenible, explicó Diana Lucía Gómez, profesional universitaria de
la secretaria de Planeación y Ambiente de Risaralda.
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