Hoy se cumplen 50 dias desde aquél momento cumbre de la
presidencia de Iván Duque cuando, siguiendo el libreto que le montaron los
amigos ultraderechistas de Luigi Echeverri en Washington,dijo que “ los días y
las horas de Maduro en el poder estaban contadas”. No solo Maduro no se ha
caído sino que los Estados Unidos apenas se quedaron de libretistas de una
rebelión que nunca se dio y actuaron como banqueros desconfiables
al permitir que la plata del pueblo venezolano no la administrara más el
antiguo conductor de un bus en Caracas y se la decomisaron abiertamente.
Hace 50 dias que el presidente Duque,mal aconsejado como
siempre, y dirigido a control remoto por los dueños de sus algoritmos pretendió
creer que con el show de la frontera y el “cerco diplomático” se podía tumbar a
Maduro y dejar al presidente de la Asamblea Nacional encargado de verdad del
poder presidencial en Venezuela. Ni la ayuda para los sufridos venezolanos ni
la rebelión del ejército y la Guardia Nacional Bolivariana se dieron. Maduro ha
respondido con la misma algarabía grosera de siempre pero respaldado por los
gobiernos de Rusia, China y Turquía que no creen en las garantías que el
señor Guaidó les ofrece frente a las inversiones y las deudas contraídas con
ellos por el estado y la república de Venezuela.
Probablemente cualquier cosa que finalmente suceda en el vecino
país,ya sea que Maduro resulte reemplazado por alguno de sus 3.000 generales o
se quede atornillado en el poder como los tantos dictadores que su patria ha
tenido.Alguna cosa, repito,nos tocará a los colombianos de refilón o de
bataclán. Ya tenemos bastante con los problemas sociales de los exiliados en
territorio patrio.Pero falta saber si ese país se recupera o se hunde
económicamente y ya sea lo uno o lo otro, el pato lo pagamos nosotros.
@eljodario
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