“Arrópame con tu esperanza” fue la
iniciativa de las mujeres víctimas del conflicto armado que se desarrolló para
conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la
Mujer. En Pereira se cumplió con esta actividad en la Plaza de Bolívar.
Un arduo trabajo desarrollaron durante
dos semanas 15 mujeres víctimas del conflicto armado y líderes de Pereira, para
elaborar un telar o colcha con la cual expresaron al mundo su resiliencia y sus
ganas de salir adelante, a pesar de las dificultades.
Los telares o colchas hacen parte de la
iniciativa “Arrópame con tu esperanza”, con la cual las sobrevivientes de la
violencia en el país conmemoraron el Día Internacional de la Eliminación de la
Violencia Contra la Mujer.
En Colombia, según Medicina Legal,
entre enero de 2018 y el 20 de febrero de 2019 sucedieron 1.080 asesinatos de
mujeres, 12 más que en el mismo periodo del año 2017. La violencia contra las
mujeres y las niñas es evitable, puede y debe prevenirse y por tanto debe ser
una prioridad en la nueva agenda mundial de desarrollo, y tener en cuenta que
el maltrato contra la mujer no es no solo es físico, también es emocional,
psicológico, económico, laboral.
María Isabel García, líder de mujeres
en Risaralda, expresó sobre la iniciativa: “Esta es una actividad que nos
involucra a todas las mujeres del planeta, siempre me han gustado este tipo de
acciones que nos ayudan a crecer como seres humanos y como líderes, de esta
forma conocemos otras mujeres con historias similares y entre todas podemos
expresar sororidad, que no es más que la solidaridad que tenemos para ayudar a
otras mujeres a recuperarse de las dificultades ocasionadas por la
violencia a la que nos vimos sometidas”.
En este 2019 la Unidad para las
Víctimas se unió a la iniciativa “Arrópame con tu esperanza”, organizada
por las mujeres de la Mesa Nacional de Participación y la Red Nacional de
Víctimas de Violencia Sexual Entrelazando la Confianza.
Katherine Albornoz, otra mujer
participante de la iniciativa, expresó: “Aquí nos abrazamos entre compañeras,
demostrando que somos fuertes y vamos siempre mirando al frente a pesar de las
dificultades, diciéndonos unas a otras que no estamos solas y que no somos las
únicas que hemos sufrido por el conflicto armado, pero que sí eres la única que
decide si te quedas allí o sigues adelante; más vale tener amigas que
dinero”.
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