El tuiter que el presidente de los Estados Unidos
envió para que lo leyera el señor Putin, amo de todas las Rusias,podrá ser
motivo en el futuro de risas o de condenas,pero muestra a las claras como es
que el presidente de la nación más poderosa del mundo entiende su sentido de la
guerra y cómo es que ejerce la venganza contra quienes ( según su código de
valores) han cometido un daño a la humanidad.
Trump trinó la noche del 10 de abril : “Rusia
promete derribar todos y cada uno de los misiles contra Siria. Prepárate,
Rusia, porque lo que vendrán serán [misiles] bonitos, nuevos e inteligentes.
¡No deberíais ser socios de un animal que mata con gas a su gente y lo
disfruta!”
Si el señor Trump estuviera jugando a alguno de
esos artilugios que la modernidad le facilita a los jóvenes para
entretenerse,su frase podría ser tenida en cuenta como fantoche,pero como se
trata no de un juego de guerra sino de la advertencia de quien tiene a su
disposición el mayor arsenal de la tierra, pretendiendo que el antiguo
rival zarista entienda que la modernidad ya sobrepasó los límites conocidos de
misiles y armas tenebrosas, debemos aceptar que hemos entrado a un túnel
desconocido.
Hitler era fantoche, Napoléon también lo fue. Ambos
llevaron a Europa a hecatombes bélicas que solo el lento paso del
tiempo midió. Aquí la amenaza del presidente gringo es igual a la de unos de
esos modificadores de la historia, pero con un agravante, la hace por tuiter,
jugueteando como un niño atrevido y con el dedo encima del maletín desde donde
da la orden para comenzar el cataclismo mundial y el uso de las armas nucleares
que destruirían gran parte de la humanidad .
@eljodario
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